La relación entre biotecnología e ingeniería genética
Siempre que se habla de biotecnología moderna o de ADN recombinante hay una referencia a la ingeniería genética, en tanto que esta disciplina provee las técnicas y herramientas para la construcción y el desarrollo de ADN de interés industrial.
En el siglo XX hubo dos descubrimientos importantes que unieron a la genética y la biotecnología. El primero de ellos fue el de la doble hélice del ADN, en 1953, y el segundo fue el del ADN recombinante, dos décadas después, en 1973. Aunque la biotecnología existe como disciplina desde hace años, hoy gran parte de la investigación biotecnológica se basa en la manipulación de genes y proteínas. Entre los avances científicos que han surgido de esta relación, se destacan:
- Los cultivos de células animales
- El primer borrador del genoma humano
- La síntesis de moléculas de ADN recombinantes
- El desarrollo de la tecnología CRISPR para modificar o corregir el código genético de las células
- La autorización para patentar organismos genéticamente modificados en países como EE. UU.
Así, gracias a la ingeniería genética, se desarrollan productos como las enzimas producidas en forma recombinante, los fármacos y las vacunas recombinantes, y las plantas y animales transgénicos.
Gracias a la combinación de biotecnología e ingeniería genética hemos podido entender cómo se transmite la herencia genética y cómo puede transformarse para obtener innumerables beneficios.